Anticáncer

En el libro “Anticáncer. Una nueva forma de vida” del Dr. David Servan-Schreiber sostiene la teoría de que la combinación de la práctica convencional de la medicina con una metodología natural, potenciadora de las capacidades del cuerpo y la mente, incide positivamente en el tratamiento y la superación del cáncer. Asimismo, analiza con rigor determinadas conductas y hábitos frecuentes de nuestra sociedad que pueden favorecer la aparición de la enfermedad, y recomienda prácticas y ejercicios destinados a frenar su avance y fortalecer la salud. 

 

Dr. David Servan-Schreiber
Dr. David Servan-Schreiber

Relata en estas páginas el fruto de su experiencia (él mismo fue víctima de la enfermedad), algo que contribuye decisivamente a acercar el texto al lector. 

Habiendo sido tratado dos veces de un tumor cerebral maligno, Servan-Schreiber se convirtió en una figura líder en su compromiso hacia planteamientos integradores en la prevención y tratamiento del cáncer. Popularizó su conocimiento a través de seminarios, conferencias, libros, audiolibros y un blog. Falleció del tumor cerebral en Fécamp, el 24 de julio de 2011, después de casi 20 años de lucha contra un cáncer considerado terminal en el momento de su diagnóstico.


El tono del libro es enormemente positivo y esperanzador. Su propuesta es que todos deberíamos crear una “biología anticáncer”, mediante una alimentación adecuada, ejercicio físico y bienestar psicológico, que refuerce las defensas naturales y nos permita afrontar esta enfermedad con éxito.
Se refiere a su obra como una recopilación de consejos e incorpora esquemas e ilustraciones que avalan su intención didáctica y su voluntad de claridad. 

 

Transcripción del video:

 

ANTICANCER, UN NUEVO ESTILO DE VIDA

 

** Una conversación con David


** Ser médico no me impidió tener cáncer.


Nací y me crié en París pero llegué a ser médico y neurocientífico en Estados Unidos, en la universidad de Pittsburg.

Un día en un experimento de escáner cerebral uno de los pacientes no se presentó y acabé metiéndome yo mismo en el escáner. Así es como descubrí que tenía un tumor cerebral.

El libro que escribí es el libro que me hubiese gustado tener en mi recorrido a través de la enfermedad.

 

** Ofrece a tu cuerpo la oportunidad de luchar


Lo primero que aprendí es que cada uno de nosotros tiene células cancerígenas, aunque sólo uno de cada tres podría morir de cáncer, dos de cada 3 no. Eso significa que esos dos sobre tres tienen defensas naturales que ayudan a parar (ralentizar) la enfermedad. Entonces lo que tenemos que hacer es cuidarnos. Cuando hacemos esto, estamos más sanos, más felices, prevenimos el desarrollo de enfermedades y, si ya estamos enfermos, estamos ayudando a nuestro organismo lo mejor que podemos.

 

** La lucha contra el cáncer empieza en la cocina.


La comida es algo que le “haces” a tu organismo tres veces al día. Sabemos que los fitoquímicos(*) son una parte de todo lo que comes y tienen una clara influencia en tu fisiología, entonces piensa en el hecho de que lo que comes todos los días, tres veces al día, está modificando tu fisiología. Es como tocar las teclas de un piano pero con la comida que tomas. Por eso presto atención a todo lo que como desde el diagnóstico de mi tumor. Es como si tocase las teclas de mi tumor con lo que como.

Todos los días intento incluir cosas en mis comidas que me puedan aportar fitoquímicos de la propia comida y que combaten el cáncer. Una gran cantidad de ellos se encuentran en la comida y lo bueno es que no combaten un único mecanismo de cáncer, sino que emplea todo un “abanico de teclas”. 

Por ejemplo la cúrcuma actúa sobre algunos aspectos biológicos del cáncer. El sulforafano y el indole-3-carbinol del repollo o el brócoli actúan en otros aspectos, el té verde con los EGCG (Epigallocatechin gallate)  y polifenoles tendrán su papel en otro, entonces añado frambuesas y arándanos al postre y añado otra variedad de fitoquímicos que actúan en otro mecanismo del cáncer y así a lo largo del día y durante tres veces al día estoy creando una biología anticáncer. Todo el mundo puede hacer eso, sólo hay que decirles cómo pueden hacerlo.

 

(*)Los fitoquímicos son sustancias que se encuentran en los alimentos de origen vegetal, biológicamente activas, que no son nutrientes esenciales para la vida ( por lo menos a corto plazo), pero tienen efectos positivos en la salud. Se encuentran naturalmente en las plantas (frutas, vegetales, legumbres, granos enteros, nueces semillas, hongos, hierbas y especias).

Los fitoquímicos se están empezando a tener en cuenta en los últimos años, ya que se están descubriendo sus beneficios para la salud:

  • Protección contra el cáncer: actúan en la detoxificación de drogas, toxinas, carcinógenos y mutágenos (como bloqueadores y supresores), neutralizan radicales libres, inhiben enzimas que activan carcinógenos e inducen a enzimas detoxificadoras de los mismos.
  • Protección cardiovascular: evitan oxidación de LDL (protegiéndolas), reducen la síntesis y utilización de colesterol y afectan la presión sanguínea y coagulablidad.
  • Otros beneficios: retardo del envejecimiento y sus enfermedades asociadas.

Además, confieren color, aroma y sabor a los alimentos.

 

 

** La dieta anti cáncer


La WCRF (Word cáncer research foundation o la organización mundial para la investigación sobre el cáncer) nos indica que no se debería tomar más de 11 onzas de carne roja a la semana como máximo por persona (= unos 311 gramos) Actualmente la media de carne que se consume es Estados Unidos casi alcanza las 11 onzas ¡¡por día!!

La carne roja es mucho más cara que las lentejas, judías y los cereales, también que la soja y el tofu, que son un tipo de proteínas vegetales que pueden sustituir a la carne y actuar como agentes anti cancerígenos y nos permiten reducir considerablemente nuestra ingesta de productos animales y especialmente la carne roja.

De forma similar, los vegetales que son mejores para nosotros suelen ser los más baratos. Puedes añadir ajo, cebolla y puerros a casi todos los platos que cocines, excepto postres y si haces esto, que no cuesta mucho dinero, construyes una dieta anti cáncer sólida.

 

**¿ Orgánica… o no?


Otra pregunta que surge siempre es ¿realmente es necesario tomar comida orgánica? No hay duda de que es mejor la comida orgánica. Hay estudios que nos demuestran que cuando los niños toman una dieta orgánica, decrecen los residuos de pesticidas en la orina en mediciones diarias, con lo cual queda claro que es mejor tomar comida orgánica. Aun así, ante todo es preferible tomar brócoli aunque tenga algunos residuos de pesticidas que no tomar brócoli.

 

** Incluso un poco de ejercicio puede ayudar a prevenir el cáncer.


Creo que la gente no se da cuenta de la importancia que puede tener realizar un poco de ejercicio para la fisiología del cuerpo y éste es una “construcción” que resiste una gran variedad de enfermedades, incluido el cáncer.

Por ejemplo ahora tenemos estudios que nos muestran que una mujer que ha tenido cáncer de mama y camina 30 minutos 6 días a la semana (eso puede suponer ir y volver caminando al trabajo) puede reducir su riesgo de recaída en un 50%.

Las mejores medicinas que tenemos no lo hacen mejor que eso y nada te impide tomar los medicamentos y además ir caminando al trabajo. El ejercicio tiene enormes consecuencias en nuestra habilidad para combatir la biología del cáncer.

 

** No pierdas la esperanza.


Si no le contamos a la gente cómo la ciencia nos indica hasta qué punto nos podemos proteger de estas enfermedades con nuestras propias elecciones y las decisiones que tenemos en nuestras manos, les estamos transmitiendo falsa desesperanza y sabemos que la desesperanza también favorece el desarrollo del cáncer y yo estoy en contra de esto, de la falsa desesperanza.

 

** Encuentra alguien a quien cuidar, empezando por ti.


La psicología con la que hacemos frente a nuestros sueños también es importante.  Sabemos que cada uno de nosotros tiene la oportunidad de encontrar a alguien. No tiene por qué ser tu marido o tu mujer, puede ser también un hermano o hermana, un amigo o un profesional de la salud, alguien que simplemente se preocupe por lo que nos está ocurriendo. Si podemos involucrar en nuestro problema a alguien más allá de nosotros mismos y recibir ayuda de esas personas, eso le sienta bien a nuestro organismo.

Y realmente me gusta esta idea, el desarrollar una vida saludable, empezando por pasar más tiempo CON nosotros mismos y PARA nosotros mismos. Centrándonos en lo que se siente estando vivo todos los días.

 

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